6 curiosas funciones de la saliva que no conocías
Un líquido que tiene la capacidad de combatir bacterias, que ayuda a digerir alimentos, contribuye para el habla y protege la boca. Parece increíble, ¿no? Lo más sorprendente es que lo producimos todos los días sin darnos cuenta.
Esta es la saliva, un líquido incoloro, inodoro, insípido y un poco espumoso que está constituido básicamente de agua y cumple muchas funciones dentro de la cavidad oral. A seguir les contamos seis curiosas funciones de la saliva.
Lubricación: la saliva funciona como una capa protectora en la boca y hace con que las estructuras se muevan de manera suave, permitiendo la articulación de sonidos que forman el habla.
Digestión: al mezclarse con los alimentos los transforma en bolo alimenticio. Esto facilitará que sean tragados y que se inicie el proceso de digestión.
Limpieza: la saliva ayuda a remover restos de comida que quedan atrapados entre las piezas dentales.
Remineralización dental: la saturación con iones de calcio y fosfato ayuda la remineralización de los dientes.
Manutención del pH neutro: los componentes de la saliva actúan como antiácido y reducen la acumulación de placa bacteriana en los dientes.
Sensación de sabor: la intervención del solvente ayuda a las terminaciones gustativas en la lengua que funcionen.