¿Qué son y a quién afectan las paperas?
También llamadas de parotiditis, las paperas son una infección viral, aguda y generalizada, que aparecen principalmente en niños y adolescentes. Es una enfermedad producida por el paramixovirus, que causa un agrandamiento doloroso de las glándulas salivales. Antes del desarrollo de una vacuna específica para ese virus, era una enfermedad infantil común a escala mundial. Aunque hoy se puede combatirla, esa enfermedad sigue siendo una amenaza importante para la salud en el tercer mundo.
Las paperas tienen una distribución universal. Antes de la llegada de la vacuna, era una enfermedad que afectaba principalmente a los niños de 4-5 años de edad. En los países occidentale, se desencadenaban epidemias cada cuatro o cinco años. A los 14-15 años de edad más del 90% de la población había sufrido la enfermedad.
El virus de las paperas se trasmite fácilmente de persona a persona al estornudar o toser y a veces por contacto con elementos infectados por la saliva del enfermo. Tras un periodo de incubación de 2 a 3 semanas, el virus pasa a la sangre y, desde ahí, a diversos órganos, como las glándulas salivales, páncreas, hígado etc.
Sin embargo, en muchos casos la enfermedad puede producir síntomas como la inflamación de la parótida (o parotiditis), lo que causa hinchazón y dolor local, sobre todo cuando se mastica. En la forma típica, produce fiebre, malestar general, dolores musculares, dolor de garganta y dolor de cabeza. Los síntomas duran aproximadamente de 7 a 10 días.
Otros síntomas de las paperas pueden incluir boca seca, dolor en el rostro y / o de los oídos y, ocasionalmente, en casos más graves, la pérdida de la voz. Además, hasta el 20% de las personas infectadas con el virus de las paperas no presentan síntomas, por lo que es posible infectarse y propagar el virus sin saberlo.
No existe un tratamiento específico para las paperas. Los síntomas pueden ser aliviados por la aplicación de hielo intermitente o calor en la zona del cuello y por la ingesta de analgésicos. A los pacientes se les aconseja evitar cualquier jugo de frutas o alimentos ácidos, ya que estimulan las glándulas salivares, las cuales pueden ser dolorosas.