Tips para alcanzar todos los espacios entre los dientes
5 ago2014 - 08h03
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La limpieza diaria de la placa dental es fundamental para mantener sanas las encías y la boca. Todos sabemos que cepillarse los dientes por lo menos tres veces al día es fundamental para lograr una boca libre de bacterias. Pero, ¿sabes cuál es la manera correcta de limpiar todos los espacios de la cavidad oral?
No siempre logramos alcanzar aquellos espacios entre los dientes, donde la comida suele esconderse sin que nos demos cuenta. Se trata de la zona interproximal, donde la enfermedad periodontal es más frecuente y grave debido a su difícil acceso.
Para evitarla, se necesita contar con otros dispositivos más adecuados, como las sedas dentales, los cepillos interproximales o enhebradores - estos para aquellos pacientes que llevan aparatos fijos. El cepillado junto con la limpieza interproximal una o dos veces al día previene el desarrollo de gingivitis y periodontitis .
Si tienes los dientes más separados, sustituye la seda dental por un cepillo interproximal, que se utiliza en la parte exterior e interior de la boca y entre las caras laterales de los dientes. Si el cepillo interproximal no entra cómodamente, no hagas fuerza. Puede ser que el espacio no sea lo suficientemente amplio. En estos casos, se recomienda utilizar la seda dental.
Hay dos tipos de espacios interproximales y es necesario saber distinguirlos para conocer la mejor manera de limpiarlos. Se recomienda usar cepillos interproximales para los espacios abiertos y sedas o cintas dentales para los espacios cerrados.
Espacios interproximales abiertos: son espacios grandes, que pueden producirse por la falta de alguna pieza dental o una separación exagerada de los dientes (diastemas), entre otros motivos. Por eso, hay que saber cómo limpiar estas zonas. Lo recomendable es usar un cepillo interproximal, que se encuentran en diferentes formas y tamaños. Estos dispositivos son los más eficaces para remover los restos de comida en los espacios más grandes.
Espacios interproximales cerrados: los espacios interproximales cerrados son aquellos en los que hay separación moderada entre los dientes. En estas situaciones, el uso de las sedas o cintas dentales eliminan el biofilm interdental bajo la línea de las encías, previniendo la caries y la enfermedad periodontal.
Los 10 pasos para garantizar un cepillado perfecto, y así lucir una sonrisa aún más brillante.
Foto: Jupiterimages; / ThinkStock
Paso 1 - Lávate bien las manos y las uñas con agua y jabón. Después debes hacerte un enjuague con agua para eliminar los restos de comida, ya que esta acción reduce la posibilidad de que la comida se pegue entre las cerdas del cepillo.
Foto: hershin / ThinkStock
Paso 2 - Elige bien tu cepillo de dientes. El principal elemento que define la calidad de un cepillo es el grado de suavidad y la cantidad de cerdas. Opta por los suaves con por lo menos cinco mil cerdas. Recuerda cambiar el cepillo cada dos o tres meses.
Foto: Mirko Vuckovic / ThinkStock
Paso 3 - Ajusta tu técnica de cepillado. Haz movimientos vibratorios circulares con una inclinación de 45 grados sobre la superficie de los dientes. La mitad de las cerdas de los cepillos estarán cubriendo la superficie del diente y la otra mitad, las encías. Por lo tanto, es posible alcanzar el surco gingival, una región donde más se acumula la suciedad. Estos pequeños movimientos vibratorios circulares deben realizarse al menos 10 veces en cada lado del diente - el exterior y el interior.
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Paso 4 - Echa la cantidad adecuada de pasta. Recuerda que el gel dentífrico no puede ser abrasivo y se debe utilizar en pequeñas cantidades. Los niños con hasta siete años se deben cepillar los dientes con una pasta no abrasiva y sin flúor .
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Paso 5 - El hilo dental no siempre ayuda. La seda es un poderoso aliado para la prevención de las enfermedades orales, sin embargo, algunas regiones entre los dientes son más cóncavas, lo que no garantiza una remoción completa de los restos de comida con el hilo dental. Se recomienda utilizarlo en las regiones entre los dientes donde el contacto es muy apretado.
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Paso 6 - ¿Tiene un cepillo interdental? Solamente los cepillos interdentales alcanzan los espacios irregulares entre los dientes. Inserta la punta del cepillo interdental entre dos dientes en un ángulo hacia las encías. Recuerda hacer esto con cuidado. No hay necesidad de hacer movimientos de ida y vuelta, sólo hay que poner y quitar el cepillo y la limpieza ya está completa.
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Paso 7 - Improvisa cuando no tengas el cepillo de dientes. Para complementar el cepillado durante el día, especialmente cuando estás lejos de un baño, utiliza un cepillo unipenacho que permite remover la acumulación de biofilm oral de las áreas principales, conocidas como los márgenes gingivales. No hay necesidad de enjuagarse la boca o usar pasta de dientes. Este cepillo se puede utilizar en cualquier momento como auxiliar del cepillado normal.
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Paso 8 - No te olvides de la lengua. Limpiarla también debe formar parte de una higiene bucal perfecta, sobre todo para evitar la halitosis. El mal aliento está vinculado con la presencia de un tipo de placa formada en la lengua. Para evitar este problema, límpiala todos los días. Puedes usar un limpiador lingual de plástico, que elimina la suciedad sin lastimarte la lengua o provocarte ganas de vomitar.
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Paso 9 Cuidado al usar enjuagues bucales. El uso de antisépticos debe ser recomendado por el dentista. Hacerse un buen cepillado, con el uso del hilo dental y limpiadores interdentales y de la lengua son los mejores métodos para prevenir las enfermedades orales.
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Paso 10 - El cepillo también necesita cuidados. Limpia el cepillo con agua corriente. Dale unos golpecitos en la palma de la mano. También se puede echar unas pocas gotas de antiséptico oral. Recuerda que la cabeza del cepillo merece una atención especial. Antes del próximo cepillado, lava bien tu cepillo y enjuágalo una vez más con agua corriente para eliminar los residuos del desinfectante.