Cepillarte justo después de la comida y otros hábitos que perjudican la salud bucal
Una mala higiene dental no siempre es producto de la pereza, sino de no estar haciendo las cosas bien. Eso es lo que indica un reciente estudio realizado a nivel mundial por la Federación Dental Internacional (FDI).
De acuerdo con la investigación, que tuvo como objetivo descubrir qué entiende la población por buenas prácticas para la salud oral, ideal es acudir al menos una vez cada 6 meses, pero tan solo un 42% lo hace.
Éstas son las otras prácticas comunes que damos por buenas, pero que en realidad, no son recomendables:
Cepillarse justo después de cada comida
Lo recomendable es cepillarse solamente 20 minutos después de cada comida y no inmediatamente después. Según los expertos, hacerlo así favorece la actuación del flúor de la pasta dentífrica y evita empeorar la desmineralización del diente.
Tomar zumo de frutas de forma habitual
Los dentistas no recomiendan tomarlos habitualmente, pues contienen bastante azúcar y aumentan el riesgo de caries. Además, muchos son ácidos y pueden ayudar a erosionar los dientes.
Enjuagarse con agua al finalizar el cepillado
Es clave dejar actuar el flúor de la pasta dentífrica. No se debe enjugarse con agua después del cepillado para no impedir que el flúor actue en la boca.