Menopausia y salud bucal: tres enfermedades comunes
4 jan2018 - 17h22
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Con una esperanza de vida cada vez más grande, a las mujeres no les queda otra opción que sufrir las consecuencias de la menopausia durante parte de su vida. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el año 2030 habrá más de un billón de mujeres con más de 50 años. Este aumento de la esperanza de vida traerá consigo un aumento paralelo de la incidencia de enfermedades asociadas a esta etapa.
Durante la menopausia las glándulas salivales producen menos saliva por lo que se presenta sequedad bucal
Foto: Shutterstock
Una de las etapas donde la salud bucodental es más vulnerable es durante la menopausia. El descenso de la producción de hormonas durante este periodo conlleva una serie de modificaciones en las encías, la mucosa bucal y el hueso que sustenta los dientes.
Estos cambios pueden hacer perder color a los dientes, alterar su forma e incluso provocar la pérdida de piezas. Además, es más frecuente la aparición de otros síntomas orales como la sensación de ardor o sequedad en la boca.
Conozca tres enfermedades que pueden aparecer durante este período de la vida:
Gingivitis descamativa: Se caracteriza por la separación de las capas externas de las encías hasta el punto de dejar la raíz del diente expuesta, provocando sensibilidad ante agentes externos como bebidas o comida caliente o fría.
Caries radiculares: como consecuencia de la gingivitis descamativa, al quedar la raíz del diente expuesta a agentes externos, y agravado por la sequedad bucal, existe una mayor probabilidad de desarrollar caries de origen radicular.
Sequedad bucal: durante la menopausia las glándulas salivales producen menos saliva por lo que se presenta sequedad bucal. La secreción salival es importante debido a su función de mantener los tejidos húmedos y a que favorece que la boca esté más limpia.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que en el 2030 el número de mujeres con más de 50 años superará la marca de mil millones.
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Esa etapa de la vida femenina es bastante delicada, pues además de lidiar con los cuestionamientos psicológicos oriundos del envejecimiento, la mujer también debe enfrentar la menopausia, que provoca distintas modificaciones en el aspecto físico.
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Pero no apenas el aspecto físico cambia con esa etapa. La boca también requiere cuidados especiales. El descenso de la producción de hormonas durante la menopausia conlleva una serie de complicaciones en las encías, en la mucosa bucal y en el hueso que sostiene los dientes.
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Si el cuidado con la higiene bucal no es intensificado, estos cambios pueden causar muchos problemas, como la pérdida del color de los dientes, sequedad en la boca, entre otros. Acá te explicamos cuáles son las patologías bucodentales más frecuentes que padecen las mujeres durante esta etapa:
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Síndrome de la boca ardiente: Este trastorno se caracteriza por una sensación dolorosa, de quemazón o de picor, localizada por lo general en la punta y partes laterales de la lengua, labios y paladar.
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Xerostomía (boca seca): Es generado por la disminución del flujo salival, provocando alteraciones en la mucosa bucal. Los síntomas causan un déficit importante de la calidad de vida de quienes la padecen.
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Las disminuciones del flujo salival dificultan acciones tan simples como hablar y/o deglutir. La xerostomía no tratada podría reducir el sentido del gusto, dificultar la masticación, hasta reducir el placer de comer y charlar.
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Gingivitis descamativa: Debido a la falta de producción de hormonas sexuales que ocurre durante la menopausia, muchas mujeres pueden presentar gingivitis descamativa. Se caracteriza por un tejido gingival de un color rojo intenso, doloroso y fácilmente hemorrágico.
